Bosques patagónicos y cambio climático: investigar para conservar

En la actualidad se encuentra ampliamente documentado que el cambio climático impacta sobre los ecosistemas terrestres, marinos y de agua dulce causando deterioros en su estructura y función, su resiliencia y su capacidad natural de adaptación. En este artículo ahondaremos en la relación entre bosques patagónicos y cambio climático. Por Gabriel Moncada, Ingeniero en Recursos Naturales Renovables, Becario doctoral de la Administración de Parques Nacionales (APN) y del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET).

El impacto y relación entre bosques patagónicos y cambio climático

Estos efectos se ven agravados además por su interacción con otras problemáticas globales (como el crecimiento poblacional, desigualdad social, uso no sostenible de la tierra y pérdida de la biodiversidad), destacándose particularmente el aumento de la emisión de gases de efecto invernadero (GEI).

Los cambios reportados en los ecosistemas terrestres son variados, incluyendo cambios en la fisiología, la fenología, el crecimiento, la abundancia y la distribución geográfica de las especies.

En muchos casos, estos cambios superan los límites adaptativos, conduciendo a la pérdida de especies, el aumento de enfermedades, eventos masivos de mortalidad de plantas y animales, la reestructuración de ecosistemas y la declinación de los servicios ecosistémicos1.

¿Qué ocurre con los bosques nativos?

En particular, el impacto del climate change sobre los ecosistemas forestales es preocupante dado el rol que éstos tienen en la provisión de bienes y servicios ecosistémicos (Figura 1).

En este sentido, considerando la preocupación internacional creciente en reducir las emisiones de GEI e incentivar los procesos de captura de los mismos desde la atmósfera, los bosques se consideran centrales en las estrategias de mitigación del cambio climático, debido a su capacidad de almacenamiento de carbono.

No obstante, esta capacidad se encuentra condicionada a la capacidad de adaptación de los bosques a las condiciones futuras. 

Servicios ecosistémicos que proveen los bosques

Figura 1. Ejemplos de servicios ecosistémicos que proveen los bosques. Fuente: elaboración propia.

¿De qué depende que los bosques puedan adaptarse a los cambios? 

Existen dos factores claves que determinan la respuesta de las especies forestales a las condiciones ambientales: la plasticidad fenotípica y la diversidad genética.

El primer concepto refleja la capacidad de expresar diferentes características dependiendo de las condiciones de crecimiento, sin cambios en la configuración genética. Se trata de un proceso relativamente rápido en respuesta a una señal ambiental (por ejemplo, el retraso en la brotación de yemas ante un periodo excepcionalmente seco).

La diversidad genética, en cambio, refiere a las distintas variantes de genes específicos existentes en una población. Esta diversidad es la que determina la capacidad de las especies de adaptarse ante una presión de selección ejercida por el ambiente. 

El problema está en que la adaptación es un proceso lento determinado por la acumulación de cambios genéticos a largo plazo, mientras que el cambio climático ocurre en un periodo de tiempo muy corto en relación al ciclo de vida de las especies forestales, y en una magnitud que desafía los límites de la plasticidad fenotípica. En este caso, la relación entre bosques patagónicos y cambio climático es definitivamente negativa para las especies locales.

Es por esto que resulta fundamental contar con información sobre la diversidad y estructura genética de los bosques nativos, y entender qué rol cumplen estos factores en la respuesta a los efectos del cambio climático. 

Los bosques de raulí y roble pellín: un caso de estudio en Patagonia Norte

The raulí (Nothofagus alpina) y el roble pellín (N. obliqua) son dos especies del Bosque Andino Patagónico que presentan un enorme valor ecológico, económico y social. En Argentina, forman bosques mixtos que se encuentran mayoritariamente en la cuenca de los lagos Lácar-Nonthué, dentro del Parque Nacional Lanín (Figura 2).

Este organismo las ha catalogado como “Especies de Valor Especial”, por lo que revisten un alto valor de conservación, y además sustentan gran parte de la actividad económica de la región. No obstante, estos bosques patagónicos se encuentran amenazados por el cambio climático, dado que en su área de distribución las proyecciones indican condiciones desfavorables para ambas especies.

En la cuenca Lácar-Nonthué existe un marcado gradiente ambiental determinado en mayor medida por la precipitación. Se estima que en el oeste las precipitaciones oscilan los 1700 mm anuales mientras que en el este son cercanas a 1100 mm anuales (figura 2).

Figura 2. Mapa de la cuenca de los lagos Lácar-Nonthué y gradiente de precipitación.

En este escenario, la pregunta a responder es: ¿De qué depende la forma en que responden estas especies al clima? 

Para averiguarlo, estamos trabajando interinstitucionalmente entre organismos de investigación y de gestión. 

La respuesta de los árboles a las condiciones climáticas pasadas se estudia mediante la dendroclimatología. Esta disciplina combina la información registrada por los individuos en sus anillos de crecimiento con una serie de datos climáticos históricos, de manera que es posible determinar cómo han respondido a las condiciones climáticas pasadas (Figura 3).

Bosques patagónicos y cambio climático

Figura 3. Esquema representativo de la información obtenida mediante los anillos de crecimiento. Fuente: modificado a partir de ClimateKids (NASA). 

Cabe destacar que para analizar los anillos de crecimiento no es necesario cortar los árboles, sino que se extrae una sección muy pequeña con una herramienta especial (barreno de Pressler), sin infringir daños importantes.

Los antecedentes de estudio para estas especies indican que la respuesta no es igual en todos los casos, sino que varía entre especies y a lo largo de la cuenca. En términos generales, el roble pellín es más tolerante al estrés hídrico y a las altas temperaturas que el raulí, por lo que el raulí sería más vulnerable ante el cambio climático

Bosques patagónicos y cambio climático: la capacidad de adaptación

Como se mencionó anteriormente, la capacidad de adaptación de los bosques a largo plazo depende de su diversidad genética. En este sentido, los antecedentes indican que la diversidad genética también varía entre especies y a lo largo de la cuenca. Y no solo eso, sino que varía dependiendo del tipo de marcador genético que se utilice.

En síntesis, se encontraron patrones bien definidos en las respuestas de los individuos al clima y en la diversidad genética, y estos patrones estuvieron asociados a gradientes naturales en diferentes direcciones. Esto sugiere que la forma en que las especies responden a los cambios en el clima están relacionados de alguna manera a la diversidad genética y al ambiente donde crecen los individuos, pero esta relación aún no se ha esclarecido.

Para dilucidar estos aspectos y entender cómo está influyendo la diversidad genética en la forma en que responden los individuos al clima, estamos estudiando los anillos de crecimiento de cientos de individuos a lo largo de toda la cuenca, y relacionando esto con la diversidad genética de cada uno de ellos (Figura 4).

Se trata de una disciplina innovadora conocida como dendrogenómica, implementada únicamente en dos especies de Latinoamérica.

Bosques patagónicos y cambio climático

Figura 4. Representación esquemática del fundamento de la metodología del estudio. Fuente: Elaboración propia. 

Escenario actual

El escenario actual de cambio climático obliga a adoptar medidas de gestión tendientes a garantizar la conservación a largo plazo de los bosques nativos. Estas medidas deben basarse en información científica estratégica para garantizar un uso eficiente de los recursos (tiempo, dinero y mano de obra).

En este marco, los resultados obtenidos permitirán identificar patrones ambientales de respuesta a los cambios en el clima y determinar qué rol cumple la diversidad genética en esta respuesta, contribuyendo significativamente al desarrollo de estrategias de gestión acordes a criterios de sustentabilidad de los bosques mixtos de Nothofagus en un contexto de cambio climático.

Este artículo es parte del Informe Anual 2024 sobre Cambio Climático: DESCARGALO GRATIS AHORA.