Azul y verde

Energías naturales y cuidado del agua

– Maf E Tulá –

Azul y verde de Maf E Tulá

Hace algunas generaciones casi nos extinguimos como humanidad: el agua estaba en estado de intoxicación grave, la tierra seca y los ríos se hacían cada vez más y más pequeños. Un día, mientras la gente dormía, el mar envió un sueño que hablaba del agua y el origen de la vida. Cuando el canto de los pájaros de la mañana despertó a toda la ciudad estaba en el aire el propósito de sanar todas las aguas. Desde la montaña hacia al mar.

Cambiamos. Mi casa ahora se encuentra en las afueras de la ciudad, en un barrio tranquilo. Tengo muchas razones para estar enamorada de este lugar: mar delante y selva atrás. El azul y el verde en todas sus tonalidades pintan la base del paisaje. Aparecen también en detalles los colores de las flores, bichitos, pájaros y ranas, un sin fin de pequeños y fascinantes tonos. El aroma es una mezcla de mar y montaña, se mezclan las fragancias de flores y frutas de estación. El aire es húmedo tropical. Por fortuna llueve bastante. 

La montaña moja sus pies en el agua y me regala los mejores atardeceres. En su cima puedo ver cuando el sol se duerme en el horizonte marino, tiñendo toda la selva de color dorado, cambiando el cielo y el mar a los colores del fuego. 

En una de las partes más altas de la montaña se encuentra el museo sonoro, que guarda unas grandes piezas arquitectónicas y otras más bien más pequeñas, que suenan con el agua de la lluvia o el agua que corre por los canales. Las piezas llenas de vida cambian de tonalidades según la hora y según de dónde sople el viento. Me gusta visitarlas en diferentes momentos del día y escucharlas cambiar. Ahí mismo se encuentra el anfiteatro, uno de mis lugares favoritos porque siempre hay festivales y actividades culturales, conciertos, teatro, bailes, exposiciones. Por cierto, es otro punto hermosísimo desde donde ver el atardecer. 

El agua es el centro de todo aquí, el bien más sagrado para nuestra cultura. Los canales de agua circulan por toda la ciudad envolviendola en una sensación de frescura y fluidez constante. Hay fuentes en todos los espacios públicos, el agua cae por las terrazas para luego ser bombeada nuevamente hacia arriba. Hoy entendemos que el agua es el origen de la vida y la mantenemos limpia y saludable, gracias a la tecnología y a un cambio de conciencia radical. 

Honrar y respetar el agua ha implicado cambios importantes. Se enseña lo que fue el retrete, un ejemplo de cuando no se respetaba el agua y se la usaba para los desechos. Hoy por hoy, la caca jamás llega al agua. Los excrementos se utilizan para la elaboración de gas y compost y les puedo asegurar que los baños no huelen feo.

Azul y verde de Maf E Tulá

No solo cambiamos el diseño de los baños sino de las casas enteras y de los barrios. La ciudad donde vivo tiene muchas laderas, así que aprendimos a usar la gravedad a nuestro favor. Cuando llueve el agua que corre por las alcantarillas impulsa los dinamos que alimentan la Gran Batería Comunal. También hay paneles solares por todos lados, igual que hay grandes boyas dinámicas en el mar alimentándose del movimiento de las olas. 

Siempre intentamos aprovechar toda la energía disponible. Incluso inventamos unos zapatos que tienen un dínamo que se da cuerda a cada paso que damos, generando y almacenando energía con la que podemos cargar nuestros dispositivos electrónicos o podemos esperar a llegar a casa y enchufar los zapatos en la zapatera que nutre la batería de la casa usando la energía que generamos al caminar. Por eso caminamos tanto. Nos encanta caminar, entendimos que es la mejor manera de mantener el cuerpo y la mente saludables. 

Entendimos que nos va mejor cuando trabajamos en conjunto, también en el aprendizaje. Una parte de la ciudad se destina a área de formación con laboratorios de práctica para todas las materias y todas las edades. Es todo un ecosistema en realidad: los estudiantes de agricultura submarina utilizan las piezas que elaboran los estudiantes de ingeniería y a su vez los de mecánica y maquinaria fabrican las herramientas para los ingenieros. Otros estudiantes crean comisiones interdisciplinarias donde practican buscando soluciones, elaborando en conjunto proyectos novedosos, siempre acompañados por los biólogos que confirman la viabilidad ambiental de la propuesta. Aquí nacen muchos proyectos que terminan implementándose en la ciudad. 

Con esta crianza y formación, hoy en mi ciudad el respeto por el agua y la selva es lo primero. Ese objetivo en común nos ha acercado más como comunidad. Me pregunto a qué maravillosos lugares nos llevará eso en un futuro, qué nuevos sueños de conciencia nos regalará el mar. 

Maf E Tulá

Artista, compositora y activista costarricense. Amante de la selva, el mar y la cultura del trópico. Quien, a través del arte encontró un medio para comunicar un mensaje profundo y lleno de reflexión sobre la esencia del ser humano y la protección de la naturaleza. 

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